Después del miniinvierno que tuvimos la semana pasada, con nevadas por encima de los 1300 metros, y mínimas de 5 bajo cero, los bosque de hoja caduca se han llevado un buen susto, y se han puesto sus atuendos otoñales. Resulta muy curioso pasear por éstos bosques en mayo y ser traansportado en el tiempo al mes de octubre… No sabemos si se volverán a poner sus vestidos primaverales, pero en cualquier caso, merece la pena darse un paseo por éstos bosques.
Jorge Ballabriga